¡Hoy vas a descubrir por qué es importante gatear en los niños! 5 Beneficios… ¡Comenzamos!

¡Hola mamás, hola papás! He escuchado muchas veces: “mi hijo no gateó, directamente andó”, dicho como si eso fuera algo bueno para ese niño… no es así.  

El gateo es una etapa fundamental y hoy va a saber por qué. Vamos ya a por la razón de por qué es importante gatear en niños. ¡A por la primera!

Sí, el gateo va a estimular dos cosas esenciales en la escritura: la coordinación ojo-mano y la motricidad. 

La coordinación ojo-mano porque el bebé estará entrenando esta habilidad simplemente al acercarse a un objeto, mirarlo y cogerlo.  

La motricidad o sensibilidad táctil se estimulará porque el bebé va a tocar objetos y juguetes de diferentes tamaños, texturas, etc.

Un dato curioso: la gran mayoría de pacientes con estrabismo (desviación del ojo) que tengo en consulta, no han gateado. Y muchos de estos pacientes, no tienen visión en 3D o visión en profundidad. 

Bien pues el gateo va a estimular esa percepción de la profundidad, ese cálculo de distancias. Piensa que un bebé cuando está gateando, está continuamente calculando las distancias, calculando la distancia que habrá desde su cuerpo hasta el objeto o juguete que quiere coger.

¿Por qué es importante gatear en niños para esta habilidad? 

Más bien lo que va a estimular el gateo son los cambios bruscos que hay de mirada al copiar de la pizarra. 

Cuando un niño gatea, está cambiando la mirada desde su mano hasta el objeto de lejos que quiere tocar, está cambiando la mirada de cerca a lejos. ¿Y qué hace un niño cuando está copiando de la pizarra? Está mirando a su cuaderno y después mirando la pizarra, mirando en cerca y mirando en lejos.

¿Visión periférica? Sí, es la visión que nos dice dónde está todo lo que nos rodea. Por ejemplo, es la que cuando conducimos, nos dice que un coche viene rápido por un lado, la que cuando estamos jugando al fútbol nos dice que un rival viene por este lado a quitarnos el balón, etc.

¿Y para la lectura? También juega un papel fundamental para la lectura. La visión periférica es la guía de nuestros ojos, la que cuando vamos leyendo al final de una línea, nos dice dónde empieza la siguiente. 

¿El gateo estimula esta visión? Totalmente y la estimula porque cuando un niño está gateando, está siendo consciente de todo lo que le rodea, de si lo que está a este lado le interesa y va a por él o si lo que está al otro es lo que más le gusta

¡Último beneficio! 

Aunque no sea un beneficio estrictamente visual y un poco más técnico, tenía que contarte esto porque es uno de los beneficios más importantes que debes saber. Atento. 

Nuestro cerebro tiene dos hemisferios, como dos mitades: el hemisferio derecho y el hemisferio izquierdo. 

Cuando yo quiero mover mi mano o mi pie izquierdo, es la mitad derecha la que manda la información, la que dice “mueve tu mano izquierda” y va mi mano y se mueve. Y viceversa, cuando quiero mover mi mano o mi pierna derecha, es la mitad izquierda la que manda la información, como una especie de orden cruzada. 

¿Todo bien hasta ahora? Bien, pues cuando un niño está gateando si ese gateo es correcto, lo que va a hacer es mover su mano derecha y su pierna izquierda para moverse, movimientos contrarios o contralaterales que llamamos como vemos en la imagen.

Eso hará que la mitad derecha y la mitad izquierda del cerebro se conecten, unas conexiones fundamentales para la lectura, para la escritura, para la motricidad, para la lateralidad…

Quédate con esta frase: “el suelo es el primer profesor de tu hijo”. Y me refiero a que el suelo va a enseñarle mucho más de todo lo que nosotros podemos enseñarle en esas etapas tan tempranas, va a desarrollar habilidades tanto visuales como motoras cruciales para él. 

Ahora bien, todo lo que hemos visto no significa que un niño que no ha gateado, tendrá déficits. Simplemente, si ha gateado tendrá más herramientas para cuando sea mayor poder usarlas.